El “Agile Manifesto” estableció un conjunto común de valores y principios dominantes para todas las metodologías ágiles individuales en el momento.
Detalla cuatro valores básicos para habilitar equipos de alto rendimiento, donde se valora:
1º – A los individuos y su interacción, por encima de los procesos y las herramientas.
2º – El software que funciona, por encima de la documentación exhaustiva.
3º – La colaboración con el cliente, por encima de la negociación contractual.
4º – La respuesta al cambio, por encima del seguimiento de un plan.